Vivas nos queremos

María Paula Granda

@paulitagran

Vivas nos queremos! ¡Vivas nos queremos! Gritaban fuertemente al menos 60 mujeres reunidas a propósito de la convo-catoria, por parte de la Plataforma Justicia para Vanessa, a una primera asamblea abierta para organizar una gran marcha el 25 de noviembre en rechazo al feminicidio (término utilizado para señalar la alta responsabilidad que también tiene el Estado en las muertes de miles de mujeres en el país a causa de violencia machista), como se han realizado en varios países de la región bajo la consigna de ¡Ni una menos!

Si bien faltan algunos meses para la fecha propuesta para esta manifestación, tiene mucho sentido la gran convocatoria que esta iniciativa tuvo, y según sus promotoras y quienes estuvimos presentes va a seguir teniendo, puesto que en el Ecuador de hoy, de una supuesta “revolución ciudadana”, las cifras de femicidios son alarmantes, las muertes por abortos inseguros y clandestinos siguen creciendo, la brecha salarial de género no ha disminuido y más bien se han violado derechos fundamentales de los trabajadores y trabajado-ras, donde las más afectadas son las mujeres, se aprobó una ley de tierras donde se sirve al agronegocio y una serie de políticas que precarizan aún más la vida de las mujeres, generando una suma de violencias que en el caso más extremo, pero no menos común, provocan la muerte.

Ante esta realidad social lamentable, donde además de las políticas públicas y leyes anti derechos que han sido aprobadas por la Asamblea Nacional (eliminación de la ley 103 contra la violencia de las mujeres, aprobación COIP donde no se despenaliza el aborto por violación, obligando a más de 2000 niñas a parir, leyes dirigidas a la persecución de las organizaciones sociales, etc.), tenemos el reforzamiento desde las más altas esferas del poder de una cultura heteronormativa, donde el racismo y el sexismo, son unos de sus pilares fundamentales, las mujeres estamos organizadas, demostrando que estamos vivas y que podemos construir propuestas de diversa índole para subvertir el sistema heteropatriarcal capitalista que se impone como modelo de Nación y precautelar así no solo nuestras vidas sino la de todos los ecuatorianos y ecuatorianas y de la naturaleza.

En efecto, además de la intención de organizar esta marcha que congrega a muchas organizaciones del movimiento de mujeres y feministas del ecuador y a la sociedad civil, grupos de mujeres de izquierdas se reunirán este mes de septiembre para discutir una agenda política desde las mujeres para presentar a los candidatos del Acuerdo Nacional Por el Cambio; otras agrupaciones harán lo propio para entregar una serie de demandas y de propuestas en general a todos los candidatos de 2017, mientras que otros colectivos, organizaciones feministas y activistas sociales realizarán una serie de acciones por el 28 de septiembre que es el día por la despenalización del aborto en América Latina y el Caribe.

Así diversas, desde varios frentes que a veces confluyen otras veces se separan, caminamos juntas, colocando siempre nuestras voces incómodas desde el feminismo, en contra de todas las violencias vengan de donde vengan, levantando todas las luchas sociales, dialogando con diversas organizaciones populares y políticas de izquierda y el centro para que hagan también de nuestra lucha la suya, y a la derecha conservadora tanto como la del gobierno como la “tradicional” enviando el mensaje claro de que estamos en pie de guerra.